Ensayo Lineamientos de la Política Ambiental y Energética de la UAM: Acción Comunitaria a Través de Compras Conscientes y Conocimiento Normativo

Fortaleciendo la Política Ambiental y Energética de la UAM: Acción Comunitaria a Través de Compras Conscientes y Conocimiento Normativo


                                                                                                         Q, H. (2024, May 13)



La crisis ambiental global, manifestada en el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la sobreexplotación de recursos, exige una respuesta urgente y coordinada en todos los niveles de la sociedad. Las instituciones de educación superior, como la Universidad Americana (UAM) en Nicaragua, tienen un papel crucial no solo en la investigación y la formación de profesionales conscientes, sino también en la implementación de prácticas internas que reflejen y promuevan la sostenibilidad. La Política Ambiental y Energética de la UAM es un marco esencial para guiar estos esfuerzos, pero su verdadero fortalecimiento depende de la comprensión y acción informada de cada miembro de su comunidad: estudiantes, docentes, personal administrativo y directivos. Este ensayo explora cómo la promoción de hábitos de compra sostenibles en ámbitos como la ropa, la tecnología y los alimentos, junto con el conocimiento de las normativas ambientales nicaragüenses, puede empoderar a la comunidad UAM para impulsar activamente la implementación de esta política.


La forma en que consumimos tiene un impacto directo y significativo en el medio ambiente. Cada compra es, en esencia, un voto por el tipo de producción y los procesos que queremos apoyar. La Política Ambiental y Energética de la UAM, al buscar reducir la huella ecológica institucional, debe ir de la mano con la promoción de un consumo más responsable a nivel individual dentro del campus y en la vida diaria de su comunidad. Analicemos esto a través de tres categorías comunes: ropa, tecnología y alimentos.


El sector de la moda, especialmente el de la "moda rápida" (fast fashion), es uno de los más contaminantes a nivel mundial, responsable de una parte significativa del consumo de agua, el uso de químicos tóxicos y la generación de residuos textiles (UNEP, 2018). Promover compras sostenibles de ropa dentro de la comunidad UAM implica fomentar la conciencia sobre estos impactos. Acciones como comprar menos, optar por prendas de mayor calidad y durabilidad, preferir marcas con prácticas éticas y ambientales verificadas, reparar y reutilizar ropa en lugar de desecharla, y explorar el mercado de segunda mano, son formas concretas en las que los estudiantes y el personal pueden reducir su impacto. Talleres sobre reparación de ropa, mercados de intercambio en el campus o campañas de concienciación sobre el ciclo de vida de las prendas podrían ser iniciativas que la UAM podría promover para apoyar su política ambiental.


En cuanto a la tecnología, su ciclo de vida, desde la extracción de minerales raros para su fabricación hasta la gestión de los residuos electrónicos (e-waste), presenta desafíos ambientales considerables (Baldé et al., 2017). Para una comunidad universitaria altamente dependiente de dispositivos electrónicos, las compras sostenibles de tecnología significan extender la vida útil de los equipos (reparando en lugar de reemplazar), comprar productos reacondicionados cuando sea posible, elegir dispositivos con mayor eficiencia energética y, crucialmente, asegurar el reciclaje adecuado de los aparatos al final de su vida útil. La UAM podría facilitar puntos de recogida de e-waste en el campus y educar sobre los procesos de reciclaje seguros y responsables, alineándose directamente con los objetivos de gestión de residuos de su política.


Finalmente, nuestras decisiones sobre alimentos tienen profundas implicaciones ambientales, afectando el uso del suelo, el consumo de agua, las emisiones de gases de efecto invernadero (particularmente asociadas a la producción de carne y lácteos) y la generación de residuos de envases y alimentos (FAO, 2019). Fomentar la compra y el consumo sostenible de alimentos en la UAM implica promover opciones de menú más vegetarianas o veganas en la cafetería, priorizar la compra de productos locales y de temporada para reducir la huella de transporte, minimizar el desperdicio de alimentos a través de una mejor planificación y gestión, y alentar el uso de recipientes reutilizables para llevar comida o bebidas. Educar sobre los impactos de la cadena alimentaria y destacar las opciones sostenibles disponibles en el campus y sus alrededores son pasos vitales para fortalecer la política ambiental.


Más allá de las acciones individuales de consumo, el conocimiento del marco legal ambiental es fundamental para una ciudadanía y una comunidad universitaria responsables y activas. Nicaragua cuenta con normativas ambientales diseñadas para proteger sus recursos naturales y regular actividades con impacto ambiental. Conocer estas leyes no solo asegura el cumplimiento, sino que también empodera a la comunidad para exigir la protección ambiental y participar en procesos de toma de decisiones.


La Ley General del Medio Ambiente y los Recursos Naturales (Ley 217, 1996) es el pilar de la legislación ambiental nicaragüense, estableciendo los principios y normas básicas para la protección, conservación y uso racional del medio ambiente y los recursos naturales. Regula aspectos como los estudios de impacto ambiental, la gestión de áreas protegidas y el control de la contaminación. Además, existen normativas específicas, como el Reglamento de la Ley General del Medio Ambiente y los Recursos Naturales (Decreto 9-96, 1996) y regulaciones sobre la gestión integral de residuos sólidos (por ejemplo, Norma Técnica Obligatoria Nicaragüense NTON 05-014-02 sobre Gestión Integral de Residuos Sólidos No Peligrosos), que detallan procedimientos para la separación, manejo y disposición final de residuos.


Para la comunidad UAM, conocer estas normativas implica entender sus derechos y responsabilidades ambientales. Significa saber, por ejemplo, por qué es importante separar los residuos en el campus según las categorías establecidas por la universidad, cómo se gestionan los residuos peligrosos (si aplica en laboratorios, por ejemplo) o qué implica un estudio de impacto ambiental para nuevos proyectos de infraestructura en la universidad o en su entorno. Este conocimiento proporciona el contexto legal y la motivación adicional para adherirse a las directrices de la Política Ambiental y Energética de la UAM y para participar en iniciativas de sostenibilidad. Talleres informativos, materiales educativos accesibles y la integración de estos temas en el currículo pueden ser estrategias efectivas para difundir este conocimiento vital.


En conclusión, la Política Ambiental y Energética de la UAM no es un documento estático; es un compromiso dinámico que requiere la participación activa de toda la comunidad universitaria para ser verdaderamente efectivo. Promover hábitos de compra sostenibles en áreas cotidianas como la ropa, la tecnología y los alimentos permite a cada individuo traducir los principios de la política en acciones concretas que reducen el impacto ambiental. Complementar estas acciones con un conocimiento básico de las normativas ambientales nicaragüenses empodera a la comunidad para actuar de manera informada, cumplir con sus responsabilidades cívicas y apoyar el marco legal que busca proteger el entorno en el que vivimos. Al integrar la educación sobre consumo responsable y legislación ambiental, la UAM puede fortalecer significativamente la implementación de su política, cultivando una comunidad más consciente, resiliente y proactiva en la construcción de un futuro sostenible para Nicaragua y para el planeta.



Referencias:


Baldé, C. P., Forti, V., Gray, V., Kuehr, R., & Stegmann, K. (2017). *Global E-waste Monitor 2017: Quantifying of e-waste*. United Nations University (UNU), International Telecommunication Union (ITU), and International Solid Waste Association (ISWA).


FAO. (2019). *Climate change and food security: Risks and responses*. Obtenido de [https://www.fao.org/climate-change/en/](https://www.fao.org/climate-change/en/) (Nota: Citaría la sección específica o el informe si se usara un dato puntual, pero se usa como fuente general sobre el tema).


Nicaragua. Asamblea Nacional. (1996). *Ley No. 217, Ley General del Medio Ambiente y los Recursos Naturales*. La Gaceta, Diario Oficial No. 105 del 04 de junio de 1996. (Nota: En APA, para citar leyes, se cita la fuente donde se encontró, que suele ser un boletín oficial o una base de datos legal. Se pondría el título de la ley y año en texto, y en la referencia, los datos de publicación).


Nicaragua. Presidencia de la República. (1996). *Decreto No. 9-96, Reglamento de la Ley General del Medio Ambiente y los Recursos Naturales*. La Gaceta, Diario Oficial No. 131 del 15 de julio de 1996. (Nota: Similar a la ley, se cita la fuente de publicación).


Nicaragua. Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (MIFIC). (2002). *Norma Técnica Obligatoria Nicaragüense NTON 05-014-02: Gestión Integral de Residuos Sólidos No Peligrosos*. (Nota: Se cita la entidad que emite la norma y los datos de publicación si estuvieran disponibles en la fuente consultada).


UNEP. (2018). *Fashion's environmental impacts*. Obtenido de [https://www.unep.org/news-and-stories/story/fashions-environmental-impacts](https://www.unep.org/news-and-stories/story/fashions-environmental-impacts) (Nota: Se citaría la sección o informe específico si se usara un dato puntual).


Q, H. (2024, May 13). Un Eco de Urgencia: La Pérdida de Biodiversidad en Colombia. El Observador. https://elobservador.com.co/un-eco-de-urgencia-la-perdida-de-biodiversidad-en-colombia/


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